Siempre es un buen momento para un cuento, cualquier situación se puede entender mejor con un cuento y no hay un niño o persona que no le guste escuchar uno.
Siempre es un buen momento para un cuento, cualquier situación se puede entender mejor con un cuento y no hay un niño o persona que no le guste escuchar uno. Estas son las mejores ventajas de los cuentos y hay que aprovecharlas.
Por este mes te guiamos por cuatro tipos de cuentos de arte que generalmente utilizamos en nuestros talleres y que han sido un soporte, tanto de aprendizaje como para conocer y acercarnos a nuestros estudiantes.
Esta semana exploraremos cuentos que ayudan a conocer diferentes artistas de la historia, así como su obra. Camile and the sunflowers, escrito por Laurence Anholt, es un cuento en el que descubrimos a Vincent Van Gogh, las características de su vida y cómo le influenció la época en la que vivió, con el fin de entender sus obras más importantes y su técnica artística muy especial.
Muchos proyectos que realizamos con los niños se basan en obras artísticas de otros artistas, en experimentar su técnica, y conocer la historia del arte para así entender su influencia en el arte de hoy.
Una de las características de la obra de Vincent Van Gogh es que nunca fue apreciada y comprendida en su momento, sino muchos años después; es un dilema que puede ocurrirles a los artistas, inclusive hoy en día con el arte contemporáneo. Por esta razón, un cuento es la forma didáctica de que los niños vayan comprendiendo la evolución del arte y sus diferentes formas de expresión.
Otros cuentos relacionados son: Carlota y la Monna Lisa, de James Mayhew; Auguste con amor, de Brenda V. Northeast.
Los cuentos también pueden ser utilizados para aprender diferentes formas de utilizar el arte; descúbrelo la próxima semana.