Un elemento muy importante para el ser humano es sentirse validado en las diferentes actividades que realiza. Parte de esta validación son los mensajes que enviamos y recibimos, ya sea verbal o gestualmente.
Como maestros, estos mensajes de validación o invalidación marcan y forman parte de la personalidad de los niños y jóvenes, afectando así la confianza en sí mismo para sus futuras actividades y decisiones, así como las que realizan a diario, determinando su rendimiento escolar de manera positiva o negativa.
Por este mes te ofrecemos un tema fascinante y transcendente: La comunicación y la validación.
Como te ofrecimos la semana pasada, te damos ideas de actividades que puedes realizar en la clase para trabajar este tema.
Primero, para entender lo que es invalidar y cómo se pueden sentir los demás y uno mismo: escribir 10 ejemplos en un papel de frases invalidantes que haz escuchado. Hacer un gran círculo con todos en clase y compartir cómo se han sentido en esa situación.
Seguido a esto es importante terminar positivamente, por eso se debe realizar la actividad para entender cómo puedo validar a una persona. Ubicar a los niños en círculo e ir lanzando dos bolitas de lana o pelotas y las dos personas en donde se quedan cuando la profe aplaude deben decir algo reconocedor de la otra persona.
Recuerda dialogar y debatir con los niños o jóvenes sobre lo que significa VALIDAR e INVALIDAR y cómo esto nos afecta en el aula.
Existen otras maneras de invalidar a los demás, que si las reconocemos no solo el ambiente en tu aula puede cambiar, sino que puedes cambiar por completo a una persona. ¡Síguenos leyendo la próxima semana!
Cortesía: María Julia Dávalos, psicóloga Arteducarte.